Este nuevo trastorno se ve ligado a la Anorexia y la Bulimia, en donde se intenta hacer del alcohol parte de una «dieta» para mantenerse delgados. Aún no es formalmente reconocida pero señala que ya sea en conjunto con la Bulimia (donde se bebe aunque se consuman calorías pues posteriormente se vomitaran) o con la Anorexia (donde el alcohol justifica la poca ingesta de comida) este nuevo trastorno puede generar desnutrición, producir intoxicación por etanol, coma etílico y en el peor de los casos la muerte.
A pesar de que se señala a las mujeres como las de mayor incidencia a padecer un desorden 
alimenticio, con esta nueva enfermedad se señala que los hombres no están exentos a padecerla. Las personas más vulnerables son los jóvenes, entre la adolescencia y la treintena, con estudios universitarios, obsesionados con adelgazar y físicamente activos.
Los síntomas juntan lo peor de cada patología, el consumo de alcohol es desmedido y cuando la enfermedad esta muy avanzada es cuando se dejan de consumir alimentos sólidos. Debido a que hay falta de calorías, intentan «equilibrarlo» con atracones de comida y posteriormente con el vómito. Las personas que sufren de esta enfermedad se ven fatigados, con la cara hinchada, ojos rojos, presentan problemas dentales y de la piel, así como perdida del cabello.
La sociedad en su constante culto a la estética de los cuerpos esbeltos es la principal culpable en el desarrollo de estas patologías, pero a la vez resulta ilógico que un cuerpo excesivamente delgado actualmente sea catalogado como «enfermedad» mientras que unos años atrás este tipo de cuerpos era usado para grandes campañas de moda o anuncios comerciales creando así un ideal estético en la sociedad.
Debemos considerar que se ha estado corrigiendo esto con nuevos ideales estéticos, pero aún así las personas están demasiado obsesionadas con lucir prácticamente en los huesos y para conseguirlo recurren a medidas extremas como matarse de hambre o el uso de laxantes, que les prometen alcanzar una meta a corto plazo en lugar de llevar una vida saludable que promete los mismo resultados pero sin desgastar su piel, cabello o belleza natural.
Hay que comenzar a trabajar con lo que la vida nos dio y partir de ahí, ser la mejor versión de nosotros en lugar de la mejor copia de alguien más.
La Moda Ideal 